domingo, 6 de septiembre de 2015

MI CASA DE MALIBU

-Despierta, te pasas la mayor parte del tiempo soñando-
-No hagas caso- decía Elisa -Ya tienes las respuestas y cuando encuentres las preguntas, el milagro se producirá-

Siempre hemos caminado con los pies en el suelo y la cabeza en Sebastopol, esto era lo que nos decía mi madre. -Nuestra vida es ensoñadora- Esto era lo que contestaba Elisa. - A mi me visitan las oportunidades- Esto era lo que contestaba yo. -Isabel y Elisa, dos caras de una misma moneda- Esto era lo que remataba mi madre.

Y así sigue siendo. Tengo 49 años y aún sigo teniendo la cabeza en Sebastopol ¿Donde estará eso? Cuando era niña, Elisa decía que Sebastopol era el lugar donde sin duda alguna le hubiera gustado vivir a mi madre. Sebastopol para mí, es ese lugar donde el tiempo es solo uno, donde todo ocurre a la vez y, donde uno, si está atento, puede alargar la mano y encontrar aquello que anhela. No parece la respuesta mas propicia para una mujer de mi edad, mas bien parece la respuesta de mi hija, o la mía cuando yo tenía 9, su edad. Pero con todo lo dormido, con todo lo soñado, con todas las respuesta a las que conseguido ponerles sus preguntas, con todas las respuesta que aun sigue llegándome... con todo lo que ahora sé, sé que la respuesta de los 9 años es mucho más acertada que la respuesta de los 49.

Llevo meses viendo una hermosa casa que mira al mar... con ventales de cristal y su terraza de madera. La veo al caminar, al cocinar, al trabajar... Llevo meses viéndome allí sentada, de espaldas, escribiendo. Y al mirar por la ventana, puedo ver a mi hija con sus hijos jugando en la playa. Me miran y me sonríen diciéndome SI. Así pues tendré de llegar allí. ¡Una casa en Malibu! ¡Malibu! ¿Como narices he podido ensoñar algo así? Ese lugar, hasta hace meses, era absolutamente desconocido para mi. Ahora conozco esa playa y ese mar como la palma de mi mano. Conozco cada rincón de esa casa ¡y es mi hogar! ¡¡¡Malibu!!!

Ya tengo otra nueva respuesta, ahora tengo que encontrar la pregunta que me lleve a ella, os aseguro que me produce sorpresa, me divierte. Es un misterio como conseguiré llegar hasta Malibu. La suerte es que ahora Sebastopol esta más cerca, y curiosamente, en estos tiempos, se regalan preguntas. Mas pronto que tarde os enviare postales desde mi ventana en esa maravillosa casa de Malibu.

Un sueño es la respuesta a una pregunta que aún no hemos aprendido a realizar.
Abro los ojos y sueño.


3 comentarios:

  1. Por favor, no abandones nunca Sebastopol. Todos tenemos un lugar del mundo de los sueños en el que refugiarnos, o desde el que logramos concebir nuestras pequeñas vidas cotidianas. Si apartamos la cabeza de Sebastopol, en definitiva un mundo de esperanza, comenzará el declive, inexorablemente. Gracias por compartir trocitos de tu vida. Siempre p'alante. Carmen

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias. No podría, vivir entre Sebastopol y aquí ha hecho de mi lo que soy. Siempre p`alante. Un beso.

      Eliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar