domingo, 30 de diciembre de 2012

ISABEL Y ELISA: AHORA



Elisa esta pasando unos días en casa. Me sorprendió su llegada, no la esperaba. Ella vive en el  mar, y creí que en estos días preferiría quedarse allí. ¡Llego con una cometa!. Era un pájaro de colores, grande… no se donde podríamos volar esa cometa… Cuando eramos niñas nos gustaba jugar con ellas. Para Elisa eran puertas que nos conducían a otros mundo a través del cielo. Para mi un esfuerzo conseguir que permanecieran en él mucho tiempo. Yo hablaba y hablaba mientras corría y Elisa lo hacia en silencio.-Escucha Isabel, escucha como habla el viento- y yo me callaba y sentía esa música de la que ella me hablaba. Elisa siempre ha abierto puertas y ventanas para mi. Me ha enseñado a mirar el universo de otra manera. A no creer en las cosas establecidas, a preguntarme….Y sobre todo a guardar silencio. Ella conoce la magia y me la enseña cada día. Por eso sufrí tanto con lo que le ocurrió. Me sobrecogió que a un ser como a ella la vapulearan de esa manera. Como decimos los actores, “muy sobre actuado, no hay necesidad, menos es mas”. Pero Elisa es fuerte, fuerte porque no pelea.

Al abrir la puerta y verla allí con su cometa solo puede sonreír. ¡La cometa se sujetaba en el aire!. –Mira, nos vamos de viaje- eso fue lo único me dijo y yo comprendí.

Elisa no se encontraba muy bien. Su nueva vida a veces se mezclaba con la antigua y le causaba dolor.

ELISA. ¿Por qué tengo la sensación de que vivimos a medias? Tengo la sensación de que no terminamos de romper esa fina capa que nos separa de lo somos tú y yo en realidad.

ISABEL. Supongo que es un proceso, que no se rompe de repente, que hay que ir poco a poco debilitándola hasta que desaparece.

ELISA.  Llevo años sintiendo que ya…. Que casi… que voy a poder estirar los brazos y las piernas y ser…..

ISABEL. Ya eres.

ELISA. Te aseguro que siento que aun no soy yo del todo. Que estoy a punto, pero no termino de hacerlo, y lo único que lo impide soy yo. No consigo ver como hacerlo. Siento que es débil y fina pero aún esta conmigo.

ISABEL. Recuerdas cuando jugábamos a seguir los olores. Percibíamos un olor y lo seguíamos, a veces era imposible dar con él. Cuando parecía que habíamos llegado… no había nada, nada que pudiera provocarlo y el olor desaparecía. Y entonces nos reíamos, ¿recuerdas? Y tu decías – bueno ha sido divertido llegar hasta aquí-

Elisa comenzó a reír. Y yo también.

ELISA. Ahora no me parece tan divertido. Necesito encontrar el origen.

ISABEL. Pues vamos a ponernos en disposición… y a ver que nos pasa.

ELISA. ¿Volamos la cometa? Tengo una sorpresa para ti.

ISABEL. ¿A dónde iremos?

ELISA. Tu solo permanece en silencio mientras corremos…..